El diseño sistémico de la sociedad actual esta cargado de presiones que nos llevan a comportarnos de forma que a fondo no somos, ni queremos, pero existe una razón que nos mueve siempre consciente o inconscientemente, cumplir. Cumplirle a la sociedad con lo que ella a considerado correcto, mantenernos al día en redes sociales, mantenernos «perfectos» sin tristezas, ni dolores, sin queja, ni llanto, porque la vida es bella y no se puede ser mal agradecidos.
La belleza de la vida incluye vulnerabilidad, somos humanos y sentimos y experimentamos todas las emociones, es natural, pero la presión por cumplir a esa regla social de perfección nos lleva a hacia la difícil e incomprendida depresión. Necesitamos sacar lo que duele, lo incomprendido, lo que entristece, con la misma naturalidad y normalidad que se expresa lo que alegra y emociona, se pueden usar diferentes técnicas para ello, ya sea escribiendo, componiendo, pintando, bailando o llorando, pero por nuestro bienestar, esas emociones no se pueden queda allí.

El mes pasado conocimos dos casos de suicidio por depresión que conmovieron al mundo, uno fue el de Ian Alexander Jr, hijo de la actriz de cine y ganadora del Óscar, Regina King, que dos días después de su cumpleaños número 26 decidió quitarse la vida y el otro, el más reciente caso de la modelo, abogada y Miss USA 2019 Cheslie Kryst de 30 años, quien perdió la vida el pasado 30 de enero tras caer de un edificio en New York.


La familia de Ian tras la tragedia, en un comunicado expresó «Él era una luz tan brillante que se preocupaba tanto por la felicidad de los demás…» mientras que la familia de Cheslie comunicó «…Su gran luz fue la que inspiró a otros en todo el mundo con su belleza y fuerza. Amaba, reía y brillaba«. Estos casos conmocionan al mundo y nos recuerdan que la depresión es un problema real y serio, sin embargo cuantas personas a nuestro al rededor que se preocupa por los demás como lo hacia Ian, o que inspiran y brillan como Cheslie o que simplemente están allí, aparentemente «bien» lidian a diario con esta enfermedad… Esa persona puede ser tu compañero, tu colega, tu amigo, tu pareja o tu hermano.
La depresión es real y debemos entenderla para empatizar con quienes la padecen, la de-presión, no es exactamente real, la sociedad tiene sus estándares, pero no es tu obligación cumplirlos, cúmplete a ti, se fiel a ti, somos seres vulnerables y lo único que necesitamos son herramientas para saber manejar esa humana y natural vulnerabilidad.
mil gracias por tan valioso contenido